1.2.13

Lugares sagrados unidos a las estrellas

 
Es grande el misterio que encierran los Templos, Pirámides y monumentos megalíticos que se esparcen alrededor de nuestro planeta. Nos es desconocida su precisión, nada sabemos sobre cómo trabajan los inmensos megalitos ni cómo los desplazaban, incluso nos asombramos al comprobar que todas éstas expresiones en piedra guardan una absoluta fidelidad y alineación con las contelaciones que desde los cielos nos observan.
 
Pero lo cierto es que ahí están, enormes obviedades de una civilización que se expandió por todo el planeta, dominando la ciencia, la arquitectura, la astronomía y que se preocuparon de dejar constancia de su gran conocimiento a través de un mundial mensaje cifrado en los monumentos que hoy día nosotros tratamos de descifrar.
 
Así pues, nos encontramos con gran cantidad de monumentos todos ellos orientados astronómicamente y todos ellos haciendo referencia singular a los Equinoccios y los Solsticios.
¿Cuál será el verdadero mensaje que nuestros ancestros codificaron?
 

-Construcciones orientadas hacia Orión:
 
El Cañón del Chaco
 

El parque está ubicado al noroeste de Nuevo México, entre Albuquerque y Farmington, en un valle relativamente inaccesible cortado por el Chaco Wash. Conteniendo la mayor cantidad de ruinas antiguas al norte de México, el parque preserva una de las áreas culturales e históricas más importantes de América.


 
Entre el año 900 y 1150, Cañón del Chaco era un importante centro cultural de los anasazi.
Los habitantes de la región conseguían bloques de piedra arenisca y transportaban madera desde grandes distancias, armando quince importantes complejos que continuaron siendo las construcciones más grandes en América del Norte hasta el siglo XIX. Una evidencia de la arqueoastronomía en el Chaco fue sugerida, con el petroglifo «Daga del Sol» en la Colina Fajada como un ejemplo popular.
Muchas construcciones chacoanas fueron alineadas para capturar los ciclos solares y lunares, requiriendo generaciones de observaciones astronómicas y siglos de construcción experta coordinada.
Además, dibujaban símbolos que no han sido descifrados y observaban los desplazamientos solares. Se considera que los descendientes actuales de los anazasi son los zuñi y los hopi)- sigue, al igual, que con los antiguos mayas, sin resolver.

Construidos con bloques de arenisca y madera,entre el año 900-1150 DC, los 15 complejos principales del Cañón, se componen de estructuras de cuatro pisos con cientos de habitaciones cuya construcción requirió miles de horas de obra.
Este pueblo vivía en kivas, unas construcciones consistentes en excavar en el suelo la habitación y rodearla de un muro, cubriéndola, con otro piso encima o con palos y barro, de hasta 4 alturas. La kiva más importante conocida es la de Pueblo Rincañada puesto que se trataba de un templo ceremonial, de gran amplitud, sin techo, con altos muros y construido, como no podía ser de otra manera, para el culto a los astros.
 


 De hecho, los conocimientos anasazi incluían los solsticios, ciclos lunares, etc. Los arqueólogos siguen buscando pistas sobre uno de los grandes enigmas de Norteamérica. Los dibujos en las rocas podrán ayudar a desvelarlo. En este lugar de historias y fantasmas, las enormes cámaras ceremoniales subterráneas, lucían sombrías y amenazadoras, pero para los antiguos pobladores eran los lugares en donde los dioses hablaban con la gente. De todas las kivas la Casa Rinconada es la más grande y compleja, también la que mejor se conserva. Los techos y superestructuras de la mayoría de las kivas han colapsado pero en la Casa Rinconada aún es posible experimentar la danza solar una vez al año: el 21 de junio ocurre un momento mágico, como ha ocurrido durante un milenio, la luz del amanecer penetra en la kiva a través de una pequeña ventana dibujando así un rectángulo en la pared opuesta. Lentamente el rayo de luz sube hasta iluminar un nicho que no recibe luz en ningún otro momento del año.

Sus habitantes tenian sofisticados conocimientos de astronomía.
A la entrada del Cañón,se encuentran tres gigantescas losas de piedra, colocadas cerca de dos espirales grabadas en piedra sobre un muro.
En los equinoccios y solsticios, la luz del sol atraviesa estas piedras proyectando puñales de luz sobre las espirales con asombrosa precisión.


 
Keops, Kefrén y Mycerinos

Si acudimos a la constelación de Orión para fechar las Pirámides de Egipto y buscamos el año en el que coincide su disposición, nos remite al 10.500 Ac aprox. Lo cual nos plantea:
Si las pirámides son más antiguas de lo que se dice tradicionalmente, es probable que muchos otros sistemas de pirámides en el mundo también lo sean. Quizás son el vestigio de una antigua civilización globalizada como la nuestra, que sucumbió sin dejar rastros a excepción de sus inmensos monumentos, los cuales con seguridad seguirán en pie cuando nuestros monumentos más grandes se hagan polvo, haciéndonos pensar en la idea de Heráclito o Nietzsche, sobre el “eterno retorno a lo mismo”, esta tal vez no es solo una idea, sino un hecho que de constante repetición.


La Correlación de Orión es una conjetura formulada por Robert Bauval y Adrian Gilbert a mediados de los años 90, en su libro The Orion Mystery, Unlocking the Secrets of the Pyramids (El Misterio de Orión, descubriendo los secretos de las pirámides). Estos autores afirman que las pirámides de Guiza representan la imagen del cinturón de Orión en la superficie terrestre basándose en los conocimientos de los autores de la astronomía egipcia aplicados al diseño y emplazamiento de las pirámides.

Por otra parte, el egiptólogo John Anthony West junto al geólogo Robert Schoch afirmó en su libro Sperpent in the Sky: The High Wisdom of Ancient Egypt que hace doce milenios, la Esfinge de Guiza fue construida representando el cielo de esa época y estaba basada en la dirección del punto vernal de la tierra que apuntaba directamente hacia la Constelación de Leo, teniendo la forma inicial de un león, que fue degradado por la erosión y posteriormente restaurado, recibiendo su actual forma mitad león mitad hombre. Argumentan que han encontrado marcas en la Esfinge que muestran una erosión por agua de lluvia. Durante la última glaciación que también data de esa época en la cual el Sahara era un auténtico vergel, donde llovía a menudo hacia el año 10500 a. C.
 


-Construcciones orientadas hacia Draco:
 
 
Templos de Angkor en Camboya
 
Angkor Wat es el templo más grande y también el mejor conservado de los que integran el asentamiento de Angkor. Está considerado como la mayor estructura religiosa jamás construida, y uno de los tesoros arqueológicos más importantes del mundo.

Ubicado 5,5 km al norte de la actual Siem Riep, en la provincia homónima de Camboya, Angkor Wat forma parte del complejo de templos construidos en la zona de Angkor.

La gigantesca ciudad –es la mayor urbe preindustrial del mundo, y llegó a tener una superficie de 3.000 kilómetros cuadrados– está salpicada por más de mil templos, lo que la convierte en uno de los enclaves sagrados de Asia.
 
 
 
Sin embargo, sus secretos más fascinantes, relacionados con la astronomía, no son visibles a simple vista. 
 Tras examinar concienzudamente las dimensiones del templo, los investigadores descubrieron que los arqueólogos del templo habían codificado en ellas mensajes de naturaleza calendárica. Así, si observamos los muros exteriores del recinto descubrimos que tienen una longitud de doce veces 365,24 codos. Es decir, la duración exacta del año solar. Igualmente, los ejes norte-sur y este-oeste del recinto interior donde se eleva la torre central arroja una cifra casi idéntica: 365,37 codos, un número que vuelve a aludir al ciclo solar anual. 
 
En el equinoccio de primavera, un observador situado al comienzo del puente que conduce a Angkor Wat, observará con asombro que el Sol surge de madrugada justo sobre la torre central del conjunto. Tres días después, el fenómeno se repite si variamos unos metros nuestra posición. Curiosamente, la cultura temer celebraba el año nuevo en el equinoccio de primavera, y por espacio de tres días.
En este misma entrada oeste encontramos otros alineamientos destacados. El día del solsticio de verano, el Sol se eleva para el observador justo sobre la colina sagrada de Phnom Bok, a unos 17 kilómetros de Angkor Wat. Por el contrario, en el solsticio de invierno, el fenómeno se produce en dirección sudeste, y en este caso el Sol nace justo en el cercano templo de Prasat Kuk Bangro.  
 
 

El hecho de que en Angkor haya 72 templos no es ninguna concidencia, tampoco es una coincidencia que la calzada de Angkor Wat se encuentre exactamente tres cuartos de grado al Este, en términos de Precesión, tres cuartos de grado son 54 años y encontramos éste número repetido por todo Angkor.
Aquella inclinación avisaba a los constructores de Angkor del equinoccio de primavera con tres días de antelación. Solamente en el equinoccio, cuando el día y la noche tienen la misma duración, el sol se alinea al amanecer con la torre principal.
Los constructores de Angkor utilizaban cifras precesionales para conmemorar sus ideas más importantes.
La ubicación de los Templos de Angkor refleja la ubicación de las Estrellas de la constelación de Draco, del mismo modo que las Pirámides de Egipto lo hacen con la constelación de Orión.
El mismo aspecto en el cielo y en la tierra en el momento preciso.
Si hacemos coincidir la ubicación de los templos con la posición de la constelación, tenemos que retroceder en el tiempo hasta el año 10.500 AC. momento en el cual, casan a la perfección.
El Angkor que podemos observar hoy en día fue construido hace menos de mil años, pero la disposición de los templos sobre el terreno refleja la posición de la constelación de Draco en el 10.500 AC.
 
 Los Moai de la Isla de Pascua
 
Las enigmáticas esculturas de la isla de Pascua, los 'moais', podrían estar orientados de forma consciente hacia determinadas estrellas, más importantes que el Sol para la civilización 'Rapa nui', según la tesis del astrónomo del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) Juan Antonio Belmonte.
El investigador ha hecho, junto al antropólogo de la Universidad de Chile Edmundo Edwards, "una reinterpretación arqueoastronómica" de los 'ahus' -las plataformas ceremoniales sobre las que se erigen los 'moais'-, para lo que se han estudiado unos 30 de esos emplazamientos.

 
Ambos han "reinterpretado" teorías anteriores, especialmente del astrónomo estadounidense William Liller, para quien los 'ahus' estaban orientados hacia las puestas y salidas del Sol en los equinoccios y en el solsticio de invierno.
Juan Antonio Belmonte precisa que hay más de un centenar de 'ahus' en la isla, por lo que habría que hacer un estudio estadístico "en detalle" para verificar que se orientaban en función de la astronomía y de la topografía, algo similar a lo que, para su sorpresa, encontró este arqueastrónomo en Egipto.
Una peculiaridad de los 'ahus' es que la mayoría están colocados de forma que las estatuas dan la espalda al mar, lo que en principio sugiere que la orientación dominante es la topográfica.
Los 'moais' miraban al poblado de sus descendientes, pues se supone que son estatuas de grandes jefes muertos.
Sin embargo, los investigadores encontraron "connotaciones arqueoastronómicas interesantes" en estatuas situadas en el interior de la isla, de las que una está "claramente" orientada hacia las Pléyades y otras hacia la constelación de Orión.
Edmundo Edwards había oído las "ideas antiguas y la tremenda importancia" que dan los ancianos de Pascua a las estrellas y, sobre todo, a las Pléyades, que ellos llaman 'matariki' (pequeños ojitos), y al Cinturón de Orión, 'tautoru' (los tres bellos) "pero al Sol no le prestaban mucha atención".
Para los habitantes de Rapa Nui, las Pléyades indicaban el principio del año en el mes de 'Anakena', cuando salían al amanecer, y marcaban en su última visión de la tarde la estación de 'Hora nui', la mejor del año, cuando se abría la temporada de pesca y se realizan rituales en honor de los antepasados frente a los 'ahus' con sus 'moais', y estaba prohibida la guerra.
 
 
Solsticios y Equinoccios:
 
Stonehenge
 
 
Stonehenge es un monumento megalítico, tipo crómlech, de la Edad del Bronce situado cerca de Amesbury, en el condado de Wiltshire, Inglaterra, a unos trece kilómetros al norte de Salisbury.
En el solsticio de verano, el Sol sale justo atravesando el eje de la construcción, lo que hace suponer que los constructores tenían conocimientos de astronomía. El mismo día, el Sol se ocultaba atravesando el eje del Woodhenge.un amplio trabajo circular en el terreno, veinte veces más extenso que Stonehenge, rodeado por una zanja y un banco. Allí estuvo levantada una construcción de madera, ahora denominada Woodhenge, con un diseño similar al de Stonehenge.
 
Todo el conjunto está rodeado por un foso circular que mide 104 m de diámetro. Dentro de este espacio se alza un bancal en el que aparecen 56 fosas conocidas como los «agujeros de Aubrey». El bancal y el foso están cortados por «la Avenida», un camino procesional de 23 metros de ancho y 3 kilómetros de longitud, aproximadamente. Cerca se halla la «Piedra del Sacrificio». Enfrente se encuentra la «Piedra Talón». Está compuesto de un gran círculo de grandes megalitos cuya construcción se fecha hacia el 2500 a. C. El círculo de arena que rodea los megalitos está considerado la parte más antigua del monumento, habiendo sido datada sobre el 3100 a. C.
 
 
 Si uno se coloca en el centro del monumento y mira en dirección a una piedra denominada Heel Stone (piedra del Tacón), ve en seguida que la cima de esta piedra coincide con el horizonte, y si para ello se escoge el día del solsticio del verano, 21 de junio, el Sol sale casi justo por encima de la piedra. ¿Una casualidad?
 
 
 
La pirámide de Kukulkán


Su diseño tiene una forma geométrica piramidal, cuenta con nueve niveles o basamentos, cuatro fachadas principales cada una con una escalinata central, y una plataforma superior rematada por un templete. En esta construcción se rindió culto al dios maya Kukulkán ( Serpiente Emplumada ) razón por la cual se pueden apreciar motivos serpentinos en la decoración arquitectónica. Por otra parte también cuenta con simbolismos que hacen alusión a los números más importantes utilizados en el calendario Haab (calendario solar agrícola), el calendario Tzolkin (calendario sagrado) y la rueda calendárica. La alineación de la construcción de la pirámide permite que se puedan observar diversos fenómenos de luz y sombra, los cuales se producen en su propio cuerpo durante los equinoccios y solsticios cada año.

El Templo de Kukulkán, principal estructura de Chichén Itzá demuestra los profundos conocimientos de matemáticas, geometría, acústica y astronomía que los mayas poseían. Al ser una sociedad inicialmente agrícola, los mayas observaron con detenimiento el comportamiento de las estaciones, las variaciones de las trayectorias del Sol y las estrellas, y combinando sus conocimientos, lograron registrarlos en la construcción del templo dedicado a su dios Kukulkán.
Al igual que las culturas mesoamericanas, la cultura maya utilizó un calendario agrícola solar al que llamaban Haab, el cual cuenta con 18 meses o uinales, cada uinal tiene 20 días o kines. De esta forma el calendario comprende 18 x 20 = 360 días regulares o kines, más cinco días adicionales, considerados como nefastos, llamados uayeb.

El templo de Kukulkán cuenta con cuatro escalinatas, cada una de ellas tiene 91 escalones, de esta forma suman 364 y considerando la plataforma superior del templo tenemos un total 365 unidades que representan los días del Haab.
De esta forma, y acorde a los calendarios utilizados por los mayas, se puede deducir que la pirámide no solamente esta dedicada al dios Kukulkán, sino que también observa la cuenta del tiempo dando particular relevancia a sus ciclos.Al atardecer de los equinoccios de primavera y otoño, se observa en la escalinata NNE de la pirámide de Kukulcán una proyección solar serpentina, consistente en siete triángulos isósceles de luz invertidos, como resultado de la sombra que proyectan las nueve plataformas de ese edificio durante el ocaso.
En Chichén Itzá el fenómeno se ve en todo su esplendor y la imagen de la serpiente de triángulos de luz y sombra es proyectada a la alfarda NNE; conforme avanza el tiempo parece descender del templo una serpiente y el último reducto de luz se proyecta en la cabeza de la serpiente emplumada que se encuentra en la base de la escalinata. Este fenómeno ocurre en marzo y septiembre, y puede observarse aproximadamente durante un período de cinco días en las fechas más próximas a los equinoccios, la duración del efecto comienza aproximadamente 3 horas antes del ocaso, al principio de estas horas se puede ver en la balaustrada una forma de luz ondulada que poco a poco se va cerrando para formar 7 triángulos isósceles, los cuales solo pueden verse durante 10 minutos, después comienzan a desaparecer paulatinamente.


Las Líneas de Nazca

Paul Kosok, profesor en la Universidad de Historia en Long Island (Nueva York), sobrevolaba en el año 1941 los aledaños de la ciudad peruana de Nazca buscando canales de irrigación. Sin embargo, lo que descubrió fue mucho más desconcertante. Bajo sus pies pudo observar asombrosos dibujos gigantescos de pájaros gigantes, insectos, peces, flores, una araña, un cóndor, un mono, etc.

 
Las dataciones por carbono 14 de algunos elementos orgánicos encontrados en aquel lugar proporcionaron un período comprendido entre el 350 y el 600 d. de C. De igual manera, la cerámica encontrada en la región data del siglo 1 a. de C. pero las líneas propiamente dichas no pueden ser datadas. Sin embargo, los descubrimientos de Kosok no quedaron ahí. El 22 de junio de ese mismo año (1941), el profesor americano vio cómo el sol se ponía justo al final de una de las líneas, perdiéndose en la distancia a través del desierto. Este hallazgo, cuya fecha se correspondía con el solsticio de invierno en el sur de Perú, convenció a Kosok de que la finalidad de las enigmáticas líneas de la pampa de Nazca tenía un marcado carácter astronómico. Para el profesor americano se trataba del "libro de astronomía más grande del mundo", según llegó a decir el propio Kosok.

 
En esta ocasión Gerald S. Hawkins, y al contrario que en su estudio de Teotihuacan, no parece estar muy de acuerdo con esta hipótesis de trabajo. Cuando introdujo los datos de los alineamientos de Nazca en su computadora, estudió todas las posibilidades existentes que pudieran darse a lo largo de un período de tiempo muy dilatado: entre el 5000 a. de C. y el 1900 d. de C. Al final de su estudio, Hawkins llegó a la conclusión de que ninguna de las líneas de la meseta de Nazca coincidía con un momento clave como los solsticios o los equinoccios. Poco después el doctor Phillis Pitluga, del Planetarios Adler de Chicago (EE.UU) hizo una serie de descubrimientos que contradecían las afirmaciones de Hawkins. Utilizando un programa de computadora similar al empleado por él, Pitluga llegó a demostrar que la conocida araña gigante de Nazca fue concebida como modelo terrestre de la constelación de Orión y que las líneas rectas que la rodeaban fueron diseñadas para marcar la evolución de las tres estrellas del cinturón de Orión a lo largo de los tiempos. Pero como se preguntó el investigador George Hunt Williamson en su libro "Camino en el Cielo", "¿se habría tomado este trabajo el pueblo de Nazca sólo por el gusto de ver salir y ponerse el sol al final de unas estrechas líneas?"

 
Newgrange
 
Newgrange el yacimiento arqueológico más famoso de Irlanda.
Fue originalmente construido aproximadamente entre 3300-2900 a. C., de acuerdo con fechas del carbono 14 (Grogan 1991), esto le hace 500 años más antiguo que la Gran Pirámide de Giza de Egipto, y 1000 más que Stonehenge (aunque las primeras etapas de Stonehenge son aproximadamente de la misma época que Newgrange). Permaneció perdido durante más de 4000 años debido a una disminución del montículo hasta que en el siglo XVII fue descubierto por gente que buscaba piedras para la construcción, y lo describieron como una cueva.

 
Newgrange es un monumento impresionante, un montículo de piedras construido a partir de unas 200.000 toneladas de granito procedente de la bahía de Dundalk, además de cuarzo blanco traído desde las montañas Wicklow. Estaba rodeada por un círculo de 38 monolitos, de los cuales siguen en pie sólo 12. Pero lo que ha otorgado mayor fama a este complejo es el intrincado espectáculo solar que concibieron sus diseñadores, que no se limita a Newgrange, si no que se extiende a los demás túmulos (o “cairns”) del complejo.

Por el interior del montículo transcurre un pasaje de 18 metros que se adentra hasta un tercio del diámetro y lleva a una cámara cruciforme. La cámara funeraria tiene un techo en voladizo que se eleva abruptamente hasta una altura de unos 6 metros. El tejado ha permanecido casi intacto durante más de 5.000 años
 
 
 Newgrange está orientado astronómicamente: cada año, en la mañana del solsticio de invierno, la luz del sol penetra en el pasaje e ilumina el suelo de la cámara durante 17 minutos. Algunos han especulado por ello que el Sol habría tenido una gran importancia en las creencias religiosas del pueblo que lo construyó, y otros han tomado el hallazgo como referencia para estudios arqueoastronómicos en otros monumentos similares.

El 21 de Diciembre, el día más breve del año, un rayo de luz recorre el suelo iluminando finalmente la llamada cámara funeraria, iluminando la triple espiral que está tallada en su interior.
Recordemos que New Grange está en Irlanda y El Cañón del Chaco se encuentra en Nuevo México.
De nuevo, similitudes arquitectónicas que escapan a la Historia oficial, cuya respuesta queda sumida en el misterio.
 
En esta serie de tres episodios, el escritor y aventurero Graham Hancock recorre el Mundo y explica su polémica y controvertida teoría de que una antigua civilización pudiera haber existido alrededor del 10.500 a.C. Sugiere que las culturas que denominamos antiguas eran de hecho los herederos de una antigua civilización perdida...Descubre evidencias astronómicas mediante el empleo de programas de ordenador; también tiene en cuenta otras pruebas como son las geológicas y la fotografía aérea.





 
 


 

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