Rosmarinus officinalis L. (Rocío de mar)
Son conocidos sus usos como tónico para sistema nervioso, reanimante para combatir los estados de decaimiento, cansancio cerebral, debilidad general y nerviosa. Tiene propiedades como, colerética y colagoga, antiinflamatorio, antioxidante, antiespasmódico, carminativo, estimulante circulatorio, depurativo, antiséptico de uso externo, astringente, diurético, antiespasmódica y anticonvulsiva, antibacteriana y antifúngica, antidepresivo y relajante de la musculatura lisa de los bronquios. Se utiliza contra la flatulencia, halitosis, clorosis, vértigos, apoplejías, catarro crónico, asma, ictericia, escrófulas. Cuando se aplica tópicamente sobre la piel (linimentos, pomadas o lociones, etc), es cicatrizante, analgésico y para las afecciones del cuero cabelludo.
Es estimulante, tanto del estómago como del hígado y de los nervios. Por vía interna, es útil en algunos problemas hepáticos y biliares, como disquinesias y dispepsias biliares, y en combinación con otras plantas, se emplea en el tratamiento de la hepatitis. Además, gracias a sus propiedades carminativas, resulta particularmente eficaz en caso de meteorismo, flatulencia, espasmos gastrointestinales e inapetencia, además contribuye a una buena digestión. Tiene propiedades de emenagogo, promueve el flujo menstrual en caso de amenorrea y dismenorrea (favorece la menstruación, y actúa sobre retrasos menstruales, y menstruaciones escasas y dolorosas). A nivel cardiovascular, mejora la circulación sanguínea y ayuda a disminuir la tensión arterial, por lo que se utiliza en casos de hipotensión.
Uso:
Agua 500 grs.
Romero o sumidades 10 grs.
Se calienta hasta la ebullición y se toman de cuatro a cinco tazas repartidas convenientemente.
Los cogollos en infusión (20 gramos por litro de agua) y endulzados con miel de abejas, bebido por tazas, es aperitivo, estimulante, depurativo de la sangre, tonifica el estómago y las vías digestivas, fortifica el sistema nervioso y el corazón, combate las flatulencias y fetidez del aliento, clorosis, hipocondría, dolores de cabeza, vértigos, apoplegías, catarro crónico, asma, flujos blancos; las enfermedades del hígado, ictericia, escrófulas, riñones, reumatismo, hidropesía y fiebres en general.
Los baños calientes de cocimiento de romero curan las hinchazones de las piernas y alivian a los enfermos de reumatismo, fortifican a los niños raquíticos y favorecen su desarrollo.
El caldo de su cocimiento (30 gramos por litro de agua) cura toda clase de heridas y también las úlceras o llagas gangrenosas.
MAL ALIENTO:
Hojas de romero 1 0 grs., hojas de yerbabuenao menta 5 grs., agua 500 grs. Infusión, y se toma sobre las comidas.
NERVIOS:
Hojas de romero de Castilla 15 grs., agua 500 grs. Infusión y se toman 6 tazas al día.
VINO DE ROMERO:
Tomado en pequeñas porciones es un remedio muy eficaz contra los males del corazón, porque obra como calmante, y en la hidropesía del corazón segrega por la orina los jugos morbosos. El mismo efecto produce el vino de romero en el tratamiento de la hidropesía ordinaria.
En uno u otro caso, tómese diariamente, a mañana y tarde, tres o cuatro cucharadas del agradable licor al que se cobrará aficción muy pronto. La preparación de este vino es por extremo sencilla. En una botella se echa un manojito de hojas y ramitas de romero, cortadas en pedazos menudos, llénese de vino bueno, y al cabo de siete u ocho horas puede usarse la infusión o vino de romero. Las mismas ramas pueden servir para dos botellas.
Las hojas se usan al exterior en cocimiento contra las llagas gangrenosas, baños aromáticos, reumatismos articulares, baños tónicos para niños, fomentos sobre los tumores fríos y partes paralizadas.
Las fumigaciones purifican el aire de las habitaciones, y una persona que sufra de neuralgias o dolores de cabeza, puede hacer una pequeña fumigación de romero procurando respirar el humo por la nariz, teniendo la cabeza cubierta por una toalla para mejor recoger el humo; acuéstese, dormirá bien y sentirá
que los dolores poco a poco desaparecen. Haga esto durante dos o tres noches.
El polvo de romero cicatriza y desinfecta heridas.
El aceite de romero es un excelente remedio para heridas; se echan unas gotas en la herida y se aplica un trapito mojado en el mismo; es bueno para friccionar los miembros paralizados. Tomando en dosis de tres a cinco gotas °n té caliente de malva, calma los dolores del vientre y ahuyenta los gases. Contra la sarna se emplea en pomada compuesta de un gramo de aceite de romero con diez gramos de manteca de cerdo.
TÉ DE ROMERO:
10 grs. de flores para un litro de agua hirviendo fortifica el cerebro y los nervios; es bueno contrala parálisis, temblor, apoplejía del cerebro. Es muy bueno además en menstruaciones escasas. Da beneficios en la dispepsia flatulenta y excesivos gases intestinales. En estos casos se toma una taza de la infusión de romero después de las comidas.
El que vomita las comidas, tome después de cada comida un poco de polvo de romero tostado.
REUMATISMO Y MALA CIRCULACIÓN:
Fórmula: Romero blanco, ruda de Castilla y un huevo de matandré. Se cocina bien tapada hasta que quede la mitad Se pone a enfriar y al otro día se le agrega la mitad del contenido en alcoho de 90°. Hacer untura tres días sin bañarse Después se baña y repite la untura otro tres días y así hasta que cesen los dolores.
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